Pan integral de cerveza | Wholewheat beer bread



SCROLL FOR ENGLISH

Crecí oyendo a mi abuela materna contarme cómo cuando era joven, e incluso después de casarse, durante bastantes años, iba al horno a hacer su propio pan. Me hablaba de un tiempo que a mí me sonaba a ciencia ficción, porque cuando eres niño es imposible concebir que el mundo existía mucho antes de que tú nacieras. Así que el mundo antes de mi propia madre simplemente era un territorio lejano para la imaginación. 
De modo que esas historias de mi abuela explicándome que iba al horno a cocer el pan que ella amasaba en casa, una vez por semana, y que se mantenía  fresco durante días, hasta el siguiente amasado, me sonaban a cuentos que ella inventaba. Igual que cuando decía que guardaba una parte de la masa de una semana a otra, y luego la usaba en la nueva hornada. 
Lo que era mucho más real eran las tortas que ella hacía, de vez en cuando, con masa de pan. En casa esas siempre han sido simplemente, tortas a la sartén, y solo son un poco de masa de pan que en lugar de cocerse en el horno, se estira y se fríe en abundante aceite humeante. Luego se espolvorea con azúcar y se come con chocolate bien espeso.  (qué recuerdos y qué ganas de hacerlas me están entrando al recordarlo! Tengo que hacerlas ya). 

Era entonces, al estirar la masa para darle forma antes de ponerla en la sartén cuando nos hablaba del pan que ella hacía, muchos años antes. 
Han tenido que pasar muchos, muchos años para que volviera a recordar eso. Y me pasa sobre todo cuando hago pan en casa. Recuerdo su cuerpo, enorme, imponente y su risa siempre escapándosele de la boca, y ese sentido del humor que la acompañaba siempre, en esa cocina enorme de su casa, que tuvo durante mucho tiempo un hogar de leña. 
Para mí el pan casero está siempre ligado a ella, no puedo evitarlo. Y sé perfectamente que es una de esas trampas de la memoria, porque nunca la vi hacer pan, solo escuché sus historias, que pasaron de su memoria a mi imaginación, y ahora a mi memoria. 
Pero no hace falta tener recuerdos de pan casero para ponerte a hacerlo. Hacer pan en casa es una de esas cosas que si pruebas -y no puedo recomendarte más que lo hagas- repetirás. Repetirás, seguro. No hace falta complicarse la vida, de verdad. No necesitas nada en especial, ni masas madre que alimentar, ni ninguna cosa rara. Claro que puedes complicarte todo lo que quieras, y buscar ese sabor y esa textura, y mil cosas más. Pero si te apetece probar con panes sencillos y sin complicaciones, este de hoy te resultará genial. 
Es un pan recio y con miga consistente, que tiene de por sí mucho sabor. Pero tienes que probarlo, sí o sí, porque es fácil, muy completo y muy sencillo.



Pan moreno de cerveza 

Ingredientes (para 1 hogaza hermosa)

250 g harina integral de fuerza
250 g harina de fuerza blanca, y algo más para el amasado
10 g sal
20 g levadura fresca de panadero
30 g mantequilla ablandada
300 ml buena cerveza



Pon todos los ingredientes en un bol grande y mezcla hasta que la masa ligue. Pon la masa sobre una superficie de trabajo enharinada y amasa durante 5 minutos hasta que la masa esté elástica y suave. Dejála levar durante una hora en el bol, a temperatura ambiente.
Prepara una bandeja de horno con papel de hornear o una lámina de silicona antiadherente. Dale forma de bola a la masa y aplánala ligeramente con las manos.  Deja el pan levando una hora en la bandeja de horno. 
Precalienta el horno a 200º y justo al meterlo al horno, haz cortes en diagonal en la superficie. Hornea el pan 30 minutos, hasta que esté bien tostado, luego sácalo a una rejilla y déjalo enfriar completamente.




ENGLISH 

I grew up listening my granny´s stories about her youth and how she would go to bake her own bread to the wood oven at the village´s baker. She talked of a time that was too far away from me. It sounded like sci-fi. When you are a kid, it is simply impossible to image the world simply existed before you were born. So, the world before my own mum was born was, simply, inconceivable.

Those stories from my grandma on her going to the baker’s to bake the bread that she knead at home, once a week, and how it kept perfectly fresh and lasted for a week, until her new baking trip, all those seemed to me a made up story. I felt the same when she said that she saved a small amount of the dough to be used the following week. 

Many years had to go by for me to remember all these. And now, I remember all of these every time I do homemade bread. I remember her, so hugely smiling, so funny, and her amazing sense of humor, in her immense kitchen, in where for years there was a wooden stove that only she managed to properly control.

Making bread at home is something everyone should try. And if you try, you will repeat. It is one of the most rewarding experiences in the kitchen, no matter what is your level of expertise. You only need really simple ingredients, a bit of time and a hot oven to convince yourself that you make a proper loaf at home.  

Wholewheat beer bread (makes a large loaf)

Ingredients
250 g wholemeal flour
250 g strong white flour, plus extra for dusting
10 g salt
10 g dried active yeast (20 fresh baker yeast)
30 g butter, softened
300 ml good beer

Put the yeast into the beer and let aside for 10-15 minutes, until bubbly and frothy. Put all the ingredients into a bowl and mix until all the flour has been picked up. Tip the dough out onto a lightly floured surface and knead for 5 minutes until the dough is smooth. Let it rest in the bowl for 1 hour.
Line a baking tray. Tip the dough out onto your floured surface and shape into a ball, then flatten out with your hands and cut diagonal lines across the top. Put the dough on the baking tray and leave to rise for 1 hour.
Preheat the oven 200º. Bake the loaf for 30 minutes until golden brown, then transfer to a wire rack to cool.

Comparte o imprime:

6 comentarios

  1. Simplemente me parece espectacular como con esos pocos ingredientes te puede salir un pan tan rico. Yo siempre he sido de las que pensaban que el pan me llevaría horas y horas, pero visto este resultado....me tengo que lanzar si o si a hacerlo.
    Un beso fuerte.

    ResponderEliminar
  2. Te ha quedado un pan estupendo! Me encanta hacer pan en casa, así que me apunto la receta! Un saludo
    Historias con sabor

    ResponderEliminar
  3. Tiene una pinta estupenda!. En casa también hacemos pan y desde luego que merece la pena!!!. Probaré tu receta. Un besazo.-

    ResponderEliminar
  4. Hacer pan en casa es una sensación que también recomiendo. Ese pan es estupendo y tengo alguno con cerveza, parecido, pendiente.
    Un besote.

    ResponderEliminar
  5. Esta receta tiene una pinta espectacular!!
    Hace tiempo hicimos pan con el bagazo sobrante de la elaboración de cerveza e hicimos una entrada en nuestro blog.
    El bagazo es el grano malteado (malta) sobrante tras elaborar el mosto de cerveza.
    Ahora tengo una pregunta sobre esta receta.
    Sería posible agregar, además de la cerveza, un poco de bagazo a la masa??

    ResponderEliminar
  6. Pues no sabria decirte. Si te animas a probarlo, ya me cuentas. Un abrazo

    ResponderEliminar

 
Copyright © Tengo un horno y sé cómo usarlo. Diseñado con por Las Cosas de Maite